1) El retrato se organiza sobre la descripción física (prosopografía) y moral (etopeya) de la persona propia (autorretrato) o ajena (semblanza); pero también contiene la narración sumaria de hechos relevantes y la argumentación en su parte final o conclusiva.
En el amplísimo mundo del periodismo, el retrato es una forma de la crónica que se realiza a través de un testigo directo: la entrevistadora o el entrevistador; quien, por lo general, transforma el texto dialogado de la entrevista en una combinación de citas en estilo directo o indirecto.
Lo más importante es que la práctica de la entrevista y el retrato promueve la empatía, enseña a escuchar de forma activa y a conocer a los demás a través de su libre expresión.
2) La autobiografía consiste en la narración de la vida en primera persona, pero desborda el orden cronológico para integrar distintas dimensiones de la persona. Todos tenemos una identidad múltiple como resultado de una pluralidad de mundos sociales en que nos hemos iniciado como aprendices: la familia, la escuela, las aficiones y los oficios o las profesiones, los viajes, las fiestas y los rituales colectivos, la memoria histórica y cultural, la práctica de la ciudadanía.
Tanto el retrato como la autobiografía se expresan hoy día a través de las redes sociales. Sin embargo, el género digital que mejor los contiene y los comunica sigue siendo el blog (weblog, "bitácora"), desde comienzos del milenio.
Weblog o blog significa, literalmente, un "almacén de la memoria personal en la red"; aunque no es un mero depósito o repositorio de contenidos, a diferencia de los almacenes tecnológicos en la "nube" (Dropbox, Google Drive, iCloud, etc.), sino que está abierto a la relación humana y a la interacción a través de los comentarios.
A su vez, las entradas (post) en el blog personal se comparten y se difunden a través de otras aplicaciones, que funcionan como medios sociales de comunicación: Facebook, Twitter, Instagram, etc, también llamados microblogs (microblogueo, microblogging).
3) El debate no es solamente un careo entre contrincantes, durante algunos minutos, sino que implica todas las formas del diálogo y de la argumentación expresada en primera persona. Los debates se preparan en grupo, de modo que las opiniones sean contrastadas y consensuadas desde el principio hasta el final, a lo largo de su recorrido. La ciudadanía en democracia se construye y se comunica gracias a los debates públicos sobre los temas que afectan a la mayoría social.
Nosotros hemos usado la app Spreaker para crear un podcast, dentro del canal Radio Hipatia libre con el que difundir los debates celebrados en 4º A sobre el feminismo y en 4º C sobre la independencia de Cataluña.
Hemos practicado la argumentación oral y escrita. Hemos aprendido a distinguir los argumentos racionales y emotivos, las pruebas racionales o históricas y los falsos argumentos o falacias que se apoyan en meros prejuicios, en fantasmas de nuestra psique o en el odio excluyente. La refutación de opiniones contrarias a las nuestras no es absoluta; se refiere a tales o a cuales argumentos y propuestas, pero no declara inválidas a las personas. Esa sería, es, la peor de las falacias, aunque se practique con demasiada frecuencia en los medios de comunicación de masas y en la política.
4) El artículo de opinión toma pie en el debate público para expresar una tesis y sostenerla por medio de argumentos, que pretenden convencer a las lectoras y a los lectores o aportar claridad sobre un tema controvertido. Es mucho más eficaz y posible convencer a alguien de la validez de un argumento sobre un hecho concreto o un tema específico, con (relativamente) pocas palabras, que generalizar sin pruebas o pedir la adhesión a una opinión general sin argumentos.
5) El comentario de texto es un género muy antiguo, que procede de la antigüedad griega y hebrea. Sin embargo, en la actualidad tiene una estructura muy simple, que se acerca al artículo de opinión y se practica en la crítica cultural. Es el género de la reseña: literaria, científica, artística, de teatro y de cine, de series o de videojuegos, incluso de deportes u otros espectáculos.
Se divide en dos partes: el comentario formal y el comentario crítico. La primera parte consiste en la descripción y la exposición del texto comentado, que se compone, a su vez de un análisis de su forma y una síntesis de su contenido. La segunda parte intenta comprender la intención de la autora o del autor, para tomar postura de forma argumentativa acerca de los temas que plantea y proponer una alternativa, de acuerdo con sus ideas o en contradicción con ellas.
6) El Banco Común de Conocimientos es una introducción al aprendizaje de por vida, que se comparte con generosidad y con gratuidad en los nuevos espacios comunes, herederos de las culturas populares en los pueblos, las calles y las barriadas: wikis, talleres, bancos de tiempo, tutoriales.
Hemos aprendido a ordenar y combinar la exposición con las instrucciones, para comunicar lo que sabemos hacer como resultado de nuestras aficiones, hobbies o vocaciones en germen.
Lo más importante era reconocer que todos los aprendizajes se basan en la experiencia probada y compartida. Los saberes académicos no son meras teorías ni principios dogmáticos que se transmiten para reproducirse mecánicamente en las aulas. Se apoyan en la investigación personal y en una comunidad de práctica que los comprueba y los critica, como hemos hecho con el BCC.
7) El Parlamento de la Humanidad se refiere a la política como una herramienta al alcance de cualquier ciudadana o ciudadano, que se organiza por medio de normas y principios de acción al servicio del bien común.
El discurso normativo o preceptivo se basa en los derechos humanos desde hace milenios. Sin embargo, ha sido en la Modernidad, desde la Revolución Francesa, que las democracias han fundado las leyes sobre la condición humana que nos hace iguales.
No tiene sentido una especie de obediencia ciega por miedo al castigo, sino que las normas sirven para resolver problemas y para hacer posible la inclusión de todas y todos. Tanto las sanciones como los reconocimientos se proponen y se revisan en comunidad.
El discurso normativo o preceptivo se basa en los derechos humanos desde hace milenios. Sin embargo, ha sido en la Modernidad, desde la Revolución Francesa, que las democracias han fundado las leyes sobre la condición humana que nos hace iguales.
No tiene sentido una especie de obediencia ciega por miedo al castigo, sino que las normas sirven para resolver problemas y para hacer posible la inclusión de todas y todos. Tanto las sanciones como los reconocimientos se proponen y se revisan en comunidad.
8) El diario de aprendizaje es un género narrativo de uso frecuente en la vida escolar. Lo hemos practicado en la tutoría de 4º C para dar cuento de lo aprendido en el proyecto "Va de igualdad": la crítica a los estereotipos y a los prejuicios que sostienen el machismo y pretenden justificar la desigualdad entre los géneros.